En el post de hoy os cuento todo lo que debéis saber sobre la radiofrecuencia: qué es, para qué sirve y sobre todo por qué os interesa.
La primera vez que descubrí la radiofrecuencia por mí misma fue en una colaboración que hice con CurrentBody sobre su dispositivo de radiofrecuencia facial en casa. A partir de ese momento quise investigar más sobre su uso en centros de estética y cómo se pueden obtener los mejores resultados.
La radiofrecuencia no es ni mucho menos un tratamiento nuevo ni la última moda en el mercado. De hecho si lleva tantos años en pie es porque ha demostrado funcionar.
La búsqueda de métodos efectivos y sobre todo no invasivos para mejorar la apariencia y tratar diversas afecciones ha llevado al auge de la radiofrecuencia estética. Y es que, esta técnica, que ha ganado popularidad en el ámbito de la belleza y la salud, ofrece una variedad de beneficios que van más allá de lo superficial.
Existen varios tipos de radiofrecuencia, como la tripolar o la fraccionada, y en aquí podréis saber cuál se ajusta más a cada caso.
Si todavía no sabéis si la radiofrecuencia es para vosotros, echadle un vistazo a la Comparativa de radiofrecuencia con otros tratamientos: ¿cuál es mejor?. La radiofrecuencia tiene efectos específicos tanto sobre la piel del rostro como del cuerpo.
Si ya os habéis decidido a haceros este tratamiento, os recomiendo que repase qué hacer antes y después de cada tratamiento de radiofrecuencia. Además, este es un tratamiento muy versátil, por lo que podéis combinarlo fácilmente con otros para potenciar los resultados en la piel.
¿Qué es exactamente la radiofrecuencia estética y por qué ha capturado la atención de tantos? ¡Seguid leyendo, darlings!
Qué es la radiofrecuencia en estética
La radiofrecuencia estética es un procedimiento no quirúrgico que utiliza energía electromagnética para estimular la producción de colágeno y mejorar la apariencia de la piel. Este proceso se realiza a través de un dispositivo que emite ondas de radiofrecuencia controladas.
¡La radiofrecuencia estética es como un “entrenamiento” para tu piel sin necesidad de cirugía! ¿Sabes cómo? Usa una especie de aparato que emite ondas electromagnéticas para estimular el colágeno y dejar tu piel radiante.
Es como un spa tecnológico para tu rostro y cuerpo, y se usa para un montón de cosas diferentes: desde tratamientos anti-envejecimiento hasta reducción de dolores musculares, así como para eliminar imperfecciones estéticas de la piel.
Cómo se hace la radiofrecuencia y qué se siente
El procedimiento implica el deslizamiento del dispositivo de radiofrecuencia sobre la piel, generando un calor suave y agradable. A diferencia de otros tratamientos, con este no solo no sufres molestias sino que notas una sensación de bienestar y relajación.
Cuando me hago la radiofrecuencia para la piel del rostro, para mí es un momento de relax muy agradable la verdad. No solo trabajas en el estado de tu piel sino que además disfrutas de un momento para ti.
Cuántas sesiones se necesitan
El número de sesiones puede variar, generalmente se recomienda una vez al mes para obtener resultados óptimos. Los efectos suelen notarse progresivamente, con resultados visibles después de algunas sesiones. También depende muchísimo de para qué os estéis haciendo el tratamiento.
Se necesita un intervalo mínimo de 15 días entre sesiones. Lo habitual, sea el tipo de radiofrecuencia que sea, es tener las citas una vez cada dos semanas o una vez al mes.
¿A qué edad hacer la radiofrecuencia facial?
No existe una edad específica para realizar la radiofrecuencia facial. Se puede considerar a partir de los 30 años, que es la edad que yo tengo, cuando comienzan a aparecer los primeros signos de envejecimiento, pero la idoneidad de este procedimiento depende de las necesidades individuales y la evaluación profesional. Porque si por ejemplo lo vas a usar para quitar cicatrices o para un mioma, pues la edad no tiene nada que ver.
Para qué sirve la radiofrecuencia
Aquí viene la parte interesante, porque como os decía, la radiofrecuencia se usa para muchísimas cosas diferentes.
Radiofrecuencia para el dolor
Uno de los aspectos más destacados es su aplicación en el alivio del dolor, ya sea el dolor de espalda, de hombro o incluso asociado con ciertas condiciones como hemorroides.
Los tratamientos de radiofrecuencia para el dolor suelen ser indoloros y no invasivos. Los pacientes pueden experimentar una sensación de calor o ligero enrojecimiento en el área tratada, pero por lo general, no se requiere tiempo de recuperación y los pacientes pueden reanudar sus actividades normales inmediatamente después del procedimiento.
Radiofrecuencia para la celulitis
El tratamiento de la celulitis con radiofrecuencia se lleva a cabo mediante un dispositivo que emite ondas electromagnéticas a través de la piel, igual que para otros usos. Estas ondas penetran las capas superficiales y llegan a las capas más profundas, donde actúan calentando el tejido subcutáneo.
Al calentar las capas más profundas de la piel, la radiofrecuencia estimula la producción de colágeno y elastina, dos componentes clave para mantener la firmeza y elasticidad de la piel. Esto puede ayudar a mejorar la apariencia de la celulitis al reducir la flacidez y mejorar la textura de la piel.
Radiofrecuencia para la flacidez
Durante el procedimiento de radiofrecuencia para tratar la flacidez de la piel, la energía de radiofrecuencia penetra en las capas dérmicas, estimulando la producción de colágeno y elastina. Estas proteínas son fundamentales para mantener la firmeza y elasticidad de la piel.
Es común sentir un calor suave y agradable en la piel. Algunas personas pueden experimentar una sensación de calidez más intensa, pero por lo general, no es dolorosa.
La duración del tratamiento varía según el tamaño del área tratada. Se suelen recomendar varias sesiones para obtener resultados óptimos, con intervalos de tiempo mínimos entre cada sesión.
Este es el tratamiento que a mí me interesaba, ya que mi mayor problema es la flacidez corporal.
Estuve llamando a varias clínicas para preguntar, porque a veces no ponen los precios en las webs, y de media, el coste de una sesión de radiofrecuencia para tratar la flacidez en una zona específica del cuerpo puede oscilar entre los 80 y los 200 euros, aproximadamente. Estos son precios de España (en concreto en clínicas de Zamora y Salamanca), para otros países habría que consultar.
Radiofrecuencia para las estrías
En el ámbito estético, se utiliza para mejorar la apariencia de las estrías. En este tratamiento el calor generado por la radiofrecuencia estimula la producción de colágeno y elastina, lo que puede ayudar a mejorar la apariencia de las estrías al hacer que la piel sea más firme y elástica.
Es importante señalar que la efectividad de la radiofrecuencia para tratar las estrías puede depender del tipo de estrías (rojas, blancas, recientes o antiguas). Las estrías más antiguas o blancas pueden ser más difíciles de tratar en comparación con las estrías más recientes o rojas.
Radiofrecuencia para los miomas
Los miomas son tumores no cancerosos que se desarrollan en el útero y, aunque en muchos casos no causan síntomas, en otros pueden provocar sangrado abundante, dolor pélvico o presión sobre la vejiga.
El tratamiento de los miomas uterinos con radiofrecuencia implica un procedimiento llamado ablación por radiofrecuencia, donde se introduce un catéter especial a través de la vagina hasta el útero bajo la guía de imágenes por ultrasonido. Una vez ubicado en el mioma, el catéter emite energía de radiofrecuencia para calentar y destruir las células del mioma.
Radiofrecuencia para cicatrices
La radiofrecuencia es una opción terapéutica utilizada para mejorar la apariencia de las cicatrices, aunque su eficacia puede variar según el tipo y la gravedad de la cicatriz.
Este procedimiento puede ayudar a suavizar y mejorar la apariencia de las cicatrices, especialmente aquellas que son hipertróficas o queloides. Una cicatriz hipertrófica es una protuberancia gruesa en la piel, mientras que un queloide es una cicatriz abultada que se extiende más allá del área original de la lesión.
El calor generado por la radiofrecuencia ayuda a estimular la producción de colágeno y a mejorar la circulación sanguínea en la zona tratada, lo que puede ayudar a suavizar la cicatriz con el tiempo.
Radiofrecuencia para adelgazar
Aunque se dice que la radiofrecuencia se usa para adelgazar, lo cierto es que no sirve para eso. La radiofrecuencia no se emplea específicamente como un método para perder peso en el sentido de reducir grasa corporal de forma directa.
En cambio, se utiliza en tratamientos que pueden complementar programas de pérdida de peso o remodelación corporal. La radiofrecuencia puede tener efectos en la piel y en algunas áreas específicas del cuerpo que pueden ayudar en la apariencia y la textura de la piel después de una pérdida de peso significativa.
Radiofrecuencia para varices
La aplicación de la radiofrecuencia para tratar varices generalmente implica un procedimiento llamado ablación por radiofrecuencia. Durante este procedimiento se inserta un catéter a través de una pequeña incisión en la vena afectada.
El catéter emite energía de radiofrecuencia para calentar y cerrar la vena varicosa. Con el tiempo, la vena se colapsa y es reabsorbida por el cuerpo, mejorando así la circulación sanguínea y la apariencia de las varices. Este tratamiento es más comúnmente utilizado para tratar venas varicosas más grandes y puede ser considerado como una alternativa a la cirugía.
Radiofrecuencia para suelo pélvico
En el caso del suelo pélvico, la radiofrecuencia se ha explorado para ayudar a fortalecer esta área, especialmente en el tratamiento de la incontinencia urinaria o el prolapso vaginal leve a moderado.
El procedimiento de radiofrecuencia para fortalecer el suelo pélvico generalmente implica la introducción de un dispositivo especializado en la vagina o a través de la piel en la zona perineal.
Este dispositivo emite ondas de radiofrecuencia controladas para estimular la contracción y fortalecimiento de los músculos del suelo pélvico. Este tratamiento busca mejorar la función y tono muscular en el área, ayudando a controlar la incontinencia urinaria o los problemas asociados con el prolapso.
Beneficios e inconvenientes
La radiofrecuencia ofrece una alternativa no invasiva para mejorar la apariencia y aliviar ciertos dolores, sin embargo, los resultados pueden variar y algunos pacientes pueden experimentar sensibilidad temporal en la piel después del procedimiento.
Pros
Entre sus pros, destaca su capacidad para estimular la producción de colágeno y elastina, lo que mejora la firmeza y la textura de la piel.
Además, es un procedimiento no invasivo, lo que significa que generalmente no requiere tiempo de recuperación y los pacientes pueden retomar sus actividades cotidianas rápidamente.
Otra ventaja es su aplicación versátil: desde el tratamiento de la celulitis y la flacidez hasta el alivio del dolor en ciertas afecciones, ofreciendo una opción para múltiples necesidades estéticas y médicas.
Contras
Entre las desventajas de la radiofrecuencia, se encuentra el hecho de que los resultados pueden variar significativamente de persona a persona. Aunque muchos experimentan mejoras visibles, algunos pacientes pueden no ver resultados notables, lo que puede generar frustración.
Además, los efectos pueden ser progresivos y pueden requerir múltiples sesiones para obtener resultados satisfactorios, lo que puede implicar un compromiso prolongado antes de apreciar cambios significativos.
En resumen, la radiofrecuencia estética ofrece una gama amplia de beneficios, desde el mejoramiento estético hasta el alivio del dolor, convirtiéndose en una opción atractiva para quienes buscan mejoras sin recurrir a procedimientos invasivos. Sin embargo, es crucial buscar orientación profesional para determinar la idoneidad y el enfoque más adecuado para cada caso específico.
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Radiofrecuencia tripolar facial y cómo se usa
Recomendaciones antes y después del tratamiento de radiofrecuencia.
¿Cuál es la mejor radiofrecuencia en cada caso?
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Combinación de radiofrecuencia con otros tratamientos
Radiofrecuencia facial: para qué sirve y dónde hacerla
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Deliria Rose